domingo, 11 de enero de 2009

Estoy listo para morir...

El otro día me puse a pensar en la muerte...


Y llegue a la conclusión que estoy listo para morir... No porque sienta que ya haya cumplido mi misión en este mundo (porque todos tenemos una), ni mucho menos porque me haya rendido ya ante la vida. Sino porque se que he vivido cada segundo al máximo. Incluso cuando el domingo me quedo todo el día en pijama y no me levanto sino hasta medio día: lo hago al máximo. Por eso si me llega mañana, aunque espero que no, estaré listo para aceptarlo. Sabré que mi vida fue hermosa y la viví y goce con plenitud.

A la final la muerte es parte de vivir. Muchos dicen que desde el instante que nacemos empezamos a morir. Yo prefiero pensar que desde el instante que nacemos empezamos a vivir. Empezamos a construir una vida que seguirá su camino natural. 

Tal vez no seria justo con los que me quieren y están cerca mio, pero a mi parecer la muerte debería ser una celebración de vida. La celebración de que algo hermoso se termino. Y justamente celebración, porque fue hermoso. Como cuando terminamos una carrera; celebramos, porque durante el transcurso de ella luchamos y nos esforzamos y la vivimos con plenitud. Aunque es difícil, la muerte debería ser una celebración de haber vivido una vida con plenitud. 

Nunca niego que sea triste. Nunca niego que sea difícil ver partir al que uno quiere. Pero el poder aceptar a la muerte como parte de la vida, nos hace justamente vivirla con paz.